Sobre mí
Mi historia
Ya desde pequeña solía ir regularmente a la biblioteca de mi barrio a coger libros prestados para leerlos en casa. Esta vez iba con mi padre, pues él también quería llevarse algunos a casa.
Fui a la sala de “libros para niños”, pues con 14 años, aún me gustaba la literatura que encontraba ahí: libros coloridos de historias fantásticas, que estimulaban mi cerebro más que la aburrida realidad cotidiana.
De repente, vi un libro muy raro. Tenía una cubierta de un color un poco oscuro, en contraste con unas ilustraciones de colorido brillante, de trazo limpio, con personajes y cosas variadas. Parecían estampas, cromos o algún tipo de foto-dibujo. No sabía muy bien qué era aquello, por lo que alargué la mano y cogí el libro. Decía: “El Tarot: cartas y sus significados”.
Ah! Entonces aquello eran cartas, las imágenes coloridas que veía en la cubierta y que tanto me habían impresionado… Me senté en una silla, abrí el libro y comencé a hojearlo.
Algunos dibujos me gustaban y otros no tanto. Comencé a leer los significados de las cartas. Aquello era como un cuento, con personas, objetos, que excitaban algo dentro de mí. Era muy extraño todo aquello. Era misterioso y a la vez, me atraía muchísimo. Me di cuenta de que me tendría que llevar el libro a casa para leerlo con más tranquilidad, así que lo cogí, me reuní con mi padre en la sala de la bibliotecaria, dispuesta a llevármelo. Mi padre le echó un vistazo, antes de entregar el libro al bibliotecario para que autorizara el préstamo.
- Hija, cómo es que te quieres llevar esa TONTERÍA de libro? Esas cosas son todo mentira…
- Bueno, pero es que he empezado a leer y me ha parecido interesante.
- Devuélvelo inmediatamente a su sitio, no te lo llevas.
Cabizbaja y triste, fui a devolver el libro a la sala de niños. Mi padre me prohibía leer algo que a mí me había cautivado, mientras que para él, este tipo de contenido no contaba con su aprobación.
Sin embargo, como a mí me había atrapado me hice una promesa: no llevaría el libro a casa, pues eso disgustaba a mi padre y me podía meter en un lío pero iría por las tardes a la biblioteca, con la excusa de que en casa no me concentraba en los estudios, e iría leyendo el libro de Tarot, poco a poco, tarde tras tarde. Así lo hice. Mi padre nunca sospechó nada y yo satisfice mi curiosidad por leer acerca de aquellas misteriosas cartas.
Este fue el comienzo de lo que a día de hoy es mi pasión y a lo que me dedico ahora en cuerpo y alma.
Sobre mí
Mesalina Tarot comenzó su formación oficial como tarotista hace ya unos 8 años. Aunque mi interés por el Tarot comenzó desde bien joven, entorno a los 14, no fue hasta la edad adulta que me decidí por fin a tomar mi primer curso de Tarot: los Arcanos Mayores y sus significados. Hasta entonces mis estudios siempre habían estado enfocados a mejorar mi carrera profesional: una carrera universitaria, un MBA y posteriormente algunos cursos concretos en áreas de Diseño y Marketing.
Con el curso de Arcanos Mayores, era la primera vez que estudiaba algo porque me apetecía hacerlo, por alimentar esa curiosidad que tenía acerca del Tarot, no porque fuera a aportar algo a mi vida laboral. Y qué grata sorpresa!
El curso de Arcanos Mayores me gustó tanto que decidí embarcarme en la aventura de tomar un segundo curso: los Arcanos Menores. Esto ya añadió una nueva capa de riqueza y conocimiento al que ya había adquirido en mi primer curso.
A la vez que iba tomando estos dos cursos, iba practicando diferentes tiradas, aprendidas en clase y sacadas de internet. Leía para mí misma, para compañeros de clase y para alguna amiga que tenía afinidad con estos temas. Tales eran mis ganas de seguir aprendiendo más y más que me empecé a comprar libros complementarios a mis formaciones y a practicar todos los días, sin descanso.
Paralelamente a este interés por el Tarot, mi vida profesional empezó primero, a desestabilizarse, y segundo, a cambiar de rumbo completamente! No creo que aquello fuera casualidad. Creo que la vida me estaba empujando en una dirección diferente a la que estaba acostumbrada, permitiéndome redirigirme hacia aquello que realmente me hacía disfrutar más.
Este ha sido mi propio “Viaje de El Loco” con el Tarot y espero poder transmitir esa pasión por él, usándolo tanto de forma predictiva como herramienta de autoconocimiento/coaching, que proporciona soluciones personalizadas. Así suelen ser mis lecturas, siempre guiadas por lo que el cliente solicita y si están abiertos-as, el Tarot también les va a proporcionar una herramienta, una brújula que les va a guiar y orientar. Aparte de las lecturas, también ofrezco cursos, meditaciones y sesiones de Coaching relacionados con el Tarot. Es una herramienta fantástica para abrir la mente, buscar soluciones a problemas y tomar decisiones de todo tipo, de forma rápida y contundente. Espero poder compartir mi gran pasión por el Tarot con vosotros y que os sirva de guía como a mí!